Mérida, Yucatán, 17 de diciembre de 2012.- Las versiones fatalistas sobre el calendario maya han permitido que por primera vez la humanidad piense de manera global en su existencia, por lo que el próximo 21 de diciembre podremos hacer una reflexión sobre lo que vale la vida en el planeta, sostuvo la Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú Tum.
De visita en Yucatán para participar en el Festival de la Cultura Maya 2012, la activista guatemalteca dictó la conferencia magistral "Los mayas en el siglo XXI", en la que hizo un llamado a retornar a la filosofía de la ancestral cultura, que está en armonía con la naturaleza y el cosmos.
"Ante la cercanía de la fecha que marca el inicio de nueva era dentro de la cosmogonía maya el sensacionalismo nos ganó, pero lo bueno es que toda esta expectativa se va a terminar el día 21, por como lo están diciendo, así que el 22 de diciembre podremos hablar los mayas", apuntó.
Durante su exposición, la también defensora de los derechos humanos añadió que existe una ignorancia muy grande en el manejo del calendario de esta antigua civilización "por lo que sería muy interesante crear espacios para dar a conocer el verdadero sentido del calendario, para ver cuáles son sus beneficios para la vida de la humanidad y cómo nos puede armonizar a los humanos a nivel global".
En presencia de un público que colmó la Sala Mayamax del Gran Museo de la Cultura Maya, la ex candidata presidencial de Guatemala aseguró que, haciendo un balance positivo, una de las ventajas de que se haya despertado el interés mundial en el tema del fin del mundo es que "podremos proyectar una nueva visión del sagrado calendario".
Al valorar la coyuntura cultural de la actualidad, Menchú Tum señaló que para lograr la armonía se necesita entrelazar tres elementos: acercarnos a las matemáticas mayas, gracias a la que hoy tenemos un calendario vivo que lo podemos activar, adoptar una visión filosófica sin teorizar, que nos vincule con nuestro ancestros, y que a partir de ello elaboremos un modelo social de actuación.
Somos un ser espiritual, un ser matemático y un ser social, somos colectivos, por eso anteponemos el derecho de la colectividad por encima del individuo o el derecho individual por el colectivo, es decir, como la coexistencia en la visión del derecho es un modelo de vida, precisó.
Acompañada del director del Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY), Inocencio Higuera Ciapara, la también Embajadora de Buena Voluntad de la UNESCO mencionó que hace años era muy reivindicativa, pues tendía a pedir una compensación material, pero ahora, dijo, es tiempo de iniciar otra misión para encontrar el equilibrio en la sociedad.
Tenemos que empezar a saber por qué las civilizaciones ancestrales decían mucho sobre el equilibrio, entonces nacen nuevas perspectivas de la mente humana para poder contribuir y construir, afirmó.
Tras la plática, Rigoberta Menchú atendió a los representantes de los medios de comunicaciones locales, nacionales e internacionales, que se encuentra cubriendo las actividades del Festival.
0 comentarios:
Publicar un comentario