Hace siete años, el matrimonio conformado por Lizbeth y Robert decidió incluir en su familia al pequeño Juan Diego, un niño que conocieron en el hospital cuando estuvo a punto de morir a causa de un incendio, que al final le dejó graves secuelas en su cuerpo.
Enfermeros de profesión, se encariñaron tanto con el infante, que sufrió quemaduras en cara y extremidades, al grado que decidieron adoptarlo, en un hecho de amor sin condición y que ayudó al pequeño a librar su difícil lucha por la vida.
Hoy, a siete años de ese primer encuentro entre padres e hijo, Juan Diego llegó de la mano de Lizbeth y Robert hasta el Salón de la Historia de la sede del Ejecutivo, para encontrarse con la Gobernadora Ivonne Ortega Pacheco, en el marco de la Audiencia Pública.
Inquieto, travieso y sonriente, el menor que acaba de llegar de Galveston, Texas, Estados Unidos luego de ser sometido a una cirugía de oído y boca para corregir algunos defectos causados por las quemaduras en su rostro, entregó un ramo de rosas rojas y le dio un beso a la mandataria, con lo que dio por cumplido su sueño de conocerla.
“Eres un niño valiente, muy valiente, sólo que tienes que dejar de ser coqueto”, le expresó Ortega Pacheco mientras le regalaba un chocolate al pequeño y ambos sonreían.
Vecinos del fraccionamiento “Francisco de Montejo” de esta ciudad, Lizbeth y Robert trabajan en un conocido hospital público y en ocasiones uno de ellos tiene que pedir permiso en su centro laboral para acompañar a Juan Diego a las cirugías en Galveston.
Ante ello, la Gobernadora les reiteró todo el respaldo de su administración y giró instrucciones para que en el nosocomio en donde laboran cuenten con todas las facilidades para viajar y estar con su hijo en este proceso.
“No esperábamos esto, sólo veníamos porque el niño quería conocerla, agradecemos su apoyo, es una bella persona, no cualquiera puede gobernar y al mismo tiempo ayudar a la gente, fue muy bonito”, expresó la mujer.
Gracias a las operaciones, al cariño, amor y atención de sus padres, Juan Diego se desarrolla con toda normalidad junto con su hermano Benjamín, el primer hijo del matrimonio y quien tiene 24 años de edad.
En el marco de la Audiencia Pública 50, la mandataria estatal atendió a un total de 50 personas, quienes llegaron hasta la sede del Poder Ejecutivo para solicitar apoyos en materia de salud, apoyos para el campo y proyectos productivos, de educación, vivienda, asesoría legal, entre otros.
Como ya es costumbre en cada jornada, los funcionarios de las poco más de 40 Secretarías y entidades estatales, junto con algunas federales se ubicaron en sus mesas respectivas para recibir y dar solución a las necesidades de la ciudadanía.
Otro de los casos atendidos fue el de Indira Sotelo Alcocer, quien ha tenido que esperar siete años para ser sometida a un trasplante de riñón, pero que en breve será intervenida quirúrgicamente con apoyo del Gobierno del Estado.
Con 26 años de edad y originaria de la ciudad de Valladolid, a Indira se le detectó un problema renal en el 2002 cuando cursaba la parte final de su bachillerato y trabajaba como secretaria en una oficina, actividades que tuvo que abandonar para tratarse y recibir atención médica especializada.
Durante este tiempo, la joven ha tenido que realizar visitas constantes al médico y realizarse diálisis nueve horas diarias, además de estar bajo una rígida dieta alimenticia, y cambiar su lugar de residencia de la Sultana del Oriente a Cancún, Quintana Roo, para estar bajo el cuidado de su hermana Viviana.
Luego de recibir la noticia de que podría ser candidata a una operación de trasplante, la mujer se enfrentó al problema de que era difícil conseguir un donante; sin embargo, su suerte cambió cuando su amiga, Sheila Sánchez Arauz, le ofreció donar el órgano que necesita.
Ahora el obstáculo que le impedía ser intervenida, ya que cuenta con todos los protocolos médicos y los estudios de compatibilidad, es que no tiene los recursos necesarios para cubrir los costos que ascienden a cerca de 300 mil pesos, por lo que decidió recurrir al Gobierno del Estado por el apoyo.
Tras conocer su situación, la titular del Poder Ejecutivo le informó a la joven mujer que se harán las gestiones necesarias para que sea operada a la brevedad posible en el hospital público que cuente con lo necesario para hacer este tipo de intervenciones.
La Secretaría de Salud de Yucatán (SSY) se encargará de hacer todo los trámites necesarios y sólo dependerá de que Indira, quien se encuentra sometida a un tratamiento médico por un problema en la vejiga, se encuentre totalmente lista para ingresar al quirófano.
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